La vida de los vegetales.

Tratar de los vegetales bajo el punto de vista de su clasificación y diferencias, lo mismo que el investigar y analizar en detalle sus fuerzas, propiedades, efectos y funciones vitales, pertenece a la historia natural y demás ciencias físicas, y no a la metafísica, a la cual sólo pertenece investigar y analizar la vida en sí misma y en sus manifestaciones o diferencias esenciales y primitivas. Y aunque lo dicho hasta aquí demuestra suficientemente, que entre la vida de los vegetales y la de los animales existe esa diferencia esencial y primitiva, conviene desenvolver y confirmar esta verdad que algunos naturalistas y la escuela positivista tratan de oscurecer. Para ello bastará echar una rápida ojeada sobre la vida, facultades y funciones de los vegetales.

1º La vida vegetativa.

a) La vida de los vegetales, considerada en su raíz y principio esencial, es su forma sustancial, según queda probado, de manera que debemos concebir esta vida fundamental o sea el principio vital de los vegetales, como una actualidad sustancial, incompleta por su naturaleza, y como tal, ordenada esencialmente a informar, actuar y perfeccionar el organismo de los vegetales, constituyendo con este una sustancia determinada, distinta en especie y esencia de las demás. Este principio vital-sustancial, es único, y es el que comunica la unidad a las varias partes del organismo, siendo, [266] en consecuencia, la causa y razón porque el vegetal A es uno y tiene una esencia, y es una sustancia específica.

b) De aquí se infiere, que la diferencia esencial y primitiva entre el vegetal y el animal, consiste en la diversidad primitiva y originaria de sus respectivas formas sustanciales, según que la del animal es por su esencia superior y capaz de actuar y perfeccionar un organismo más perfecto que el que responde a la forma sustancial del vegetal, menos perfecta e inferior por su misma naturaleza, y como tal, proporcionada para actuar y perfeccionar un organismo de un orden inferior. De esta diferencia primitiva, que corresponde y se refiere a las dos formas sustanciales o principios vitales en sí mismos, nace la diferencia, que se puede llamar primitiva quoad nos, consistente en la diversidad de facultades o potencias vitales, en relación con la diversidad primitiva y esencial del principio vital respectivo. La sensibilidad reasume estas facultades que no existen en los vegetales, representa la línea que separa a éstos de los animales, y constituye la diferencia esencial, absoluta y primaria quoad nos, entre la vida vegetativa y la animal.

c) Ni se oponen a esto las disidencias y dificultades de los naturalistas en orden a la clasificación de ciertos seres vivientes, como los zoófitos, algas, esponjas, &c.: antes bien, estas disidencias y dudas vienen en apoyo de lo que acabamos de asentar, puesto que en tanto dudamos si el viviente A pertenece al reino vegetal o al animal, porque se duda si posee verdadera sensibilidad o no. En resumen: estas dudas prueban que no poseemos todavía un conocimiento exacto de los fenómenos vitales de ciertos y determinados vivientes; pero no prueban que los vegetales no sean esencialmente distintos de los animales, y siempre será verdad que, o tienen, o no tienen sensibilidad, formando parte el reino animal o vegetal, según que se verifique el uno o el otro extremo. De aquí se deduce, que la teoría que establece una clase intermedia de vivientes que pasan de un reino a otro, denominados vegeto-animales es errónea y contraria a los principios de la ciencia metafísica, y además envuelve tendencias [267] esencialmente materialistas. Si se admite que un vegetal puede transformarse y desarrollarse hasta convertirse en animal, no hay motivo racional y sólido para negar la posibilidad de que el animal puede convertirse en hombre.

2º Potencias.

a) La actividad vital primaria y esencial, incluida e identificada con la forma sustancial, que es el principio vital del vegetal, se manifiesta y revela exteriormente por medio de tres facultades o potencias: 1ª la nutritiva, cuyo objeto es conservar y reparar la sustancia del viviente por medio de la elaboración, transformación y conversión de los alimentos en propia sustancia: 2ª la aumentativa o de incremento, que realiza el incremento sustancial y cuantitativo del vegetal: 3ª la generativa, que sirve para la conservación y propagación de la especie propia, por medio de la producción de individuos semejantes.

b) Aunque los modernos naturalistas suelen reducir a dos las facultades de la vida vegetativa, incluyendo la aumentativa en la nutritiva, creemos más exacta la clasificación indicada: 1º porque el concepto propio de la nutrición, sólo incluye la conservación de la sustancia viviente por medio de la renovación o sustitución de las partes perdidas: 2º porque si bien es cierto que la facultad de incremento supone la de nutrición, también lo es que ésta puede existir sin aquella, como sucede en las plantas y animales que habiendo adquirido todo su desarrollo, se conservan o nutren sin aumentar su masa ni volumen.

3º Funciones vitales.

Así como la vida esencial y radical de los vegetales se manifiesta y multiplica en cierto modo, por medio de las potencias o facultades indicadas, así también estas potencias dan origen a diversas funciones vitales, que vienen a ser por lo mismo la manifestación actual, secundaria y última de la vida.

Indicaremos algunas:

a) La absorción, mediante la cual los vegetales atraen y reciben de la tierra por medio de las raíces las moléculas [268] que les sirven de alimento o materia para la nutrición, así como los animales reciben éstos por la boca.

b) La circulación, por medio de la cual los humores o jugos suben hasta las ramas y hojas por medio de los vasos y conductos intercelulares, volviendo a descender otra vez hacia el tronco y las raíces.

c) La digestión, la cual, aunque conviene propiamente a los animales, se atribuye o pertenece también a las plantas, porque los jugos indicados experimentan cierta modificación y alteración al subir por el tronco y ramas hasta las hojas, en las cuales, por medio de la respiración, se verifica una alteración más notable que los hace aptos para la nutrición. Los jugos o humores que absorben las raíces, se convierten en savia por medio de la circulación, digestión y respiración, de manera que puede decirse que esta savia en su movimiento desde las raíces a las hojas, corresponde al quilo, y en su movimiento desde las hojas a las partes inferiores, corresponde a la sangre en los animales.

d) La respiración. Cuando la savia llega a ciertas partes de la planta y principalmente a las hojas, recibe ciertos elementos o moléculas de la atmósfera que la rodea, y da salida, al propio tiempo, a algunos de sus elementos, como sucede en la respiración de los animales, de la cual se aplica por analogía este nombre a los vegetales. Generalmente, las plantas verdes, o las partes de este color absorben por la noche oxígeno y despiden ácido carbónico, y al contrario, durante el día, absorben el ácido carbónico de la atmósfera y despiden oxígeno. Los vegetales que carecen de partes de color verde tienen una respiración más análoga a la de los animales (1), absorbiendo oxígeno y despidiendo ácido carbónico. [269]

{(1) Acerca de la relación entre el color verde de las plantas y su modo de respiración, he aquí lo que se dice en la Historia Natural publicada en 1857 bajo la dirección de Galdo: «Los únicos órganos que presentan este fenómeno, son las partes de color verde, especialmente [269] las hojas, los peciolos foliáceos y los tallos jóvenes. Las raíces, los troncos añosos cubiertos de corteza oscura, los órganos florales y los frutos que no son verdes, las critógamas que tienen otro color, las plantas blanqueadas (descoloridas) por oscuridad, no desprenden oxígeno. No es el color verde la causa de la acción química, sino por el contrario, su efecto; y así sería más exacto decir que las plantas y los órganos que desprenden oxígeno, son verdes o se vuelven así.»}

e) La exhalación o transpiración, por medio de la cual los vegetales despiden un humor acuoso por los estomas de las hojas. Además de ésta, existe en las plantas otra transpiración insensible que se verifica por las demás partes. La exhalación o transpiración sensiblees más abundante de día que de noche, a causa de la influencia del sol sobre los estomas, que favorece este fenómeno (1).

{(1) «En este hecho de la transpiración vegetal hay dos fenómenos diferentes: 1º una pérdida insensible por todas las superficies: 2º una emanación o exhalación abundante por las superficies provistas de estomas… Antes que se conociera el importante papel de los estomas, y su abertura por la acción de la luz, se había observado que ésta influye directamente sobre la transpiración de los vegetales. Hales había notado que las plantas aumentan en peso durante la noche, lo cual se explica por la supresión regular de la exhalación en este tiempo, durante el cual las raíces continúan absorbiendo. El agua absorbida es al agua exhalada como tres es a dos. Así una tercera parte del agua absorbida queda en el vegetal, y las otras dos son exhaladas por toda la superficie, o por los estomas.» Hist. Nat. cit., ibid., pág. 60.}

f) La asimilación, por medio de la cual cada parte de la planta toma y se asimila la parte de la savia elaborada ya y preparada para la nutrición.

Existen además la florescencia o producción de flores, la fecundación, la germinación, &c., de las cuales tratan largamente los escritores de Historia Natural. [270]